Desde el punto de vista sanitario y de la protección de alimentos y otros bienes, las especies de mayor importancia son los roedores sinantropicos o comensales, es decir, aquellos que viven en estrecho contacto con el hombre
Las pérdidas económicas que causan las ratas se relacionan en primer término con rendimientos de cultivos y productos agrícolas almacenados y, en segundo término, con daños en estructuras e instalaciones industriales: roedura de cables eléctricos, tuberías, embalajes y piezas de madera, diques y canales de regadío.
Como las ratas albergan ectoparásitos, también son importantes portadoras de los agentes causales de una serie de enfermedades infecciosas, entre las cuales se encuentra la peste negra o bubónica, salmonelosis, leptospirosis, triquinosis, rabia, tifus murino y muchas otras.